Pese a que en los últimos días sorprendió con una versión a dúo de «Faithfully» junto a Willie Nelson, Steve Perry dejó en claro que no planea volver a Journey, la banda que lideró entre 1978 y 1998. Según consignó Ultimate Classic Rock, Perry dijo que “estamos bien. Fuimos geniales juntos”. “Creo que el material y nuestros logros resisten la prueba del tiempo, lo que demuestra que fuimos buenos juntos. Estoy realmente orgulloso de lo que logramos porque fuimos como soldados en las trincheras. Sabíamos que podíamos hacer lo que creíamos”, agregó. Perry homenajea a Journey en colaboración para «Farm Aid» La colaboración con Nelson formó parte de una iniciativa benéfica para «Farm Aid», pero para Perry fue también una forma de rendir tributo a una de las canciones más emblemáticas del repertorio de Journey, sin necesidad de regresar a la banda. “Amo la música nueva. Cuando escribo en el estudio trato de quitarme todo lo anterior para perseguir nuevas ideas, sin influencias externas”, explicó. Perry regresó a la música en solitario en 2018 con el disco «Traces», su primer material nuevo en casi 25 años. En 2021 editó el álbum navideño «The Season», y en 2024 lanzó una versión expandida titulada «The Season 3», además de un sencillo inédito: “Maybe This Year”. Eso sí, no hay planes de una gira. “Estoy disfrutando tanto de grabar, escribir, mezclar y masterizar, que no quiero cortar el flujo creativo en el que estoy”, confesó el cantante. Su última gran gira fue en 1995 como solista; con Journey, la última fue en 1987. «Disfruto la privacidad de mi vida ahora. Este estudio es un lugar creativo y lleno de ideas que todavía necesito terminar», concluyó. Aunque el eco de sus años dorados sigue presente en canciones como “Faithfully”, hoy su energía está puesta en explorar nuevas ideas desde la tranquilidad de su estudio.
Una canción se considera buena si evoca una fuerte conexión emocional en el oyente, logrando sus objetivos de composición y producción, lo que puede incluir una melodía pegadiza, letras impactantes, un arreglo interesante y un mensaje coherente. Aunque es altamente subjetivo y depende del gusto personal, una buena canción a menudo se distingue por la habilidad de transmitir alma, creatividad y un algo más que la hace memorable y la invita a ser escuchada repetidamente. Elementos clave que hacen a una canción buena: Conexión emocional: Una canción puede ser considerada buena si provoca emociones intensas, ya sea alegría, tristeza, empoderamiento o nostalgia. Letras memorables: Letras bien escritas, con un mensaje claro o un impacto significativo, pueden elevar una canción a un nivel superior. Melodía y gancho: Un estribillo o melodía pegadiza y fácil de recordar es fundamental para que una canción se quede con el oyente. Producción y ejecución: Un valor de producción superior, con instrumentos que trabajan juntos de forma coherente y efectiva, contribuye a la calidad general de la canción. Creatividad e imprevisibilidad: La capacidad de ser original y no caer en lo monótono, incluso dentro de un género musical definido, es un signo de una buena canción. Coherencia y estructura: Una buena canción guía al oyente a través de su estructura, manteniendo la coherencia entre sus partes. El algo más: A menudo, una buena canción incluye un elemento intangible, un algo más que la diferencia, que puede ser la autenticidad o la forma en que todos los elementos se combinan.
Pese a que en los últimos días sorprendió con una versión a dúo de «Faithfully» junto a Willie Nelson, Steve Perry dejó en claro que no planea volver a Journey, la banda que lideró entre 1978 y 1998. Según consignó Ultimate Classic Rock, Perry dijo que “estamos bien. Fuimos geniales juntos”. “Creo que el material y nuestros logros resisten la prueba del tiempo, lo que demuestra que fuimos buenos juntos. Estoy realmente orgulloso de lo que logramos porque fuimos como soldados en las trincheras. Sabíamos que podíamos hacer lo que creíamos”, agregó. Perry homenajea a Journey en colaboración para «Farm Aid» La colaboración con Nelson formó parte de una iniciativa benéfica para «Farm Aid», pero para Perry fue también una forma de rendir tributo a una de las canciones más emblemáticas del repertorio de Journey, sin necesidad de regresar a la banda. “Amo la música nueva. Cuando escribo en el estudio trato de quitarme todo lo anterior para perseguir nuevas ideas, sin influencias externas”, explicó. Perry regresó a la música en solitario en 2018 con el disco «Traces», su primer material nuevo en casi 25 años. En 2021 editó el álbum navideño «The Season», y en 2024 lanzó una versión expandida titulada «The Season 3», además de un sencillo inédito: “Maybe This Year”. Eso sí, no hay planes de una gira. “Estoy disfrutando tanto de grabar, escribir, mezclar y masterizar, que no quiero cortar el flujo creativo en el que estoy”, confesó el cantante. Su última gran gira fue en 1995 como solista; con Journey, la última fue en 1987. «Disfruto la privacidad de mi vida ahora. Este estudio es un lugar creativo y lleno de ideas que todavía necesito terminar», concluyó. Aunque el eco de sus años dorados sigue presente en canciones como “Faithfully”, hoy su energía está puesta en explorar nuevas ideas desde la tranquilidad de su estudio.
Una canción se considera buena si evoca una fuerte conexión emocional en el oyente, logrando sus objetivos de composición y producción, lo que puede incluir una melodía pegadiza, letras impactantes, un arreglo interesante y un mensaje coherente. Aunque es altamente subjetivo y depende del gusto personal, una buena canción a menudo se distingue por la habilidad de transmitir alma, creatividad y un algo más que la hace memorable y la invita a ser escuchada repetidamente. Elementos clave que hacen a una canción buena: Conexión emocional: Una canción puede ser considerada buena si provoca emociones intensas, ya sea alegría, tristeza, empoderamiento o nostalgia. Letras memorables: Letras bien escritas, con un mensaje claro o un impacto significativo, pueden elevar una canción a un nivel superior. Melodía y gancho: Un estribillo o melodía pegadiza y fácil de recordar es fundamental para que una canción se quede con el oyente. Producción y ejecución: Un valor de producción superior, con instrumentos que trabajan juntos de forma coherente y efectiva, contribuye a la calidad general de la canción. Creatividad e imprevisibilidad: La capacidad de ser original y no caer en lo monótono, incluso dentro de un género musical definido, es un signo de una buena canción. Coherencia y estructura: Una buena canción guía al oyente a través de su estructura, manteniendo la coherencia entre sus partes. El algo más: A menudo, una buena canción incluye un elemento intangible, un algo más que la diferencia, que puede ser la autenticidad o la forma en que todos los elementos se combinan.