El Congreso de Estados Unidos aprobó un proyecto de ley que obliga al Departamento de Justicia a hacer públicos sus archivos sobre el delincuente sexual convicto Jeffrey Epstein, luego de meses de oposición por parte de Donald Trump y la cúpula republicana. Tras un intenso debate, el presidente estadounidense finalmente cedió ante la presión y afirmó que promulgará la ley. La Cámara de Representantes aprobó el proyecto con una votación 427-1, siendo el único voto en contra del representante Clay Higgins, un ferviente seguidor de Trump. Posteriormente, el Senado dio su consentimiento unánime. Este trabajo bipartidista refleja la creciente presión sobre los legisladores y el gobierno para cumplir con las demandas de hacer públicos los archivos del caso Epstein, quien se suicidó en 2019 mientras enfrentaba cargos por abuso sexual y tráfico de menores. “Estas mujeres han librado la lucha más horrenda que ninguna mujer debería tener que librar. Y lo hicieron uniéndose y nunca rindiéndose”, afirmó la representante republicana Marjorie Taylor Greene, acompañada por sobrevivientes del abuso, afuera del Capitolio. El proyecto de ley establece la publicación en 30 días de todos los archivos relacionados con Epstein y su investigación. Sin embargo, se permitirá censurar información sobre las víctimas o investigaciones en curso por motivos como vergüenza o sensibilidad política. A pesar de haber cortado lazos con Epstein hace años, Trump intentó durante meses evitar la divulgación de los archivos. Incluso se enfrentó en redes sociales con Marjorie Taylor Greene, quien lo acusó de traicionar al movimiento MAGA al oponerse al proyecto. Finalmente, Trump cambió su postura y pidió aprobar la publicación de los archivos tras darse cuenta del amplio apoyo que tenía el proyecto entre los votantes republicanos. La aprobación del mismo marca un hito en la lucha por la transparencia en este caso tan polémico. Fuente: Publimetro
El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump , se encuentra nuevamente en medio de una controversia con el movimiento MAGA (Make America Great Again) y sectores del Partido Republicano. En esta ocasión, la discordia gira en torno a la liberación de los archivos del Caso Epstein. Durante su campaña presidencial, Trump había prometido divulgar toda la información judicial relacionada con el delincuente sexual convicto Jeffrey Epstein, quien falleció en 2019. Sin embargo, una vez en el poder, cambió de parecer. El conflicto más reciente surgió luego de que congresistas demócratas revelaran un correo electrónico de 2011 de Epstein donde mencionaba que Donald Trump había pasado tiempo en su residencia con una víctima de tráfico sexual. Además, en un mensaje posterior, Epstein afirmaba que el actual presidente estadounidensesabía sobre las chicas. En este contexto, se ha planteado la posibilidad de que un considerable número de republicanos en la Cámara de Representantes respalde un proyecto de ley que obligaría al Departamento de Justicia a hacer públicos todos los archivos y comunicaciones relacionados con Epstein, así como cualquier información sobre la investigación de su muerte en prisión. Esta situación ha desencadenado una intensa disputa dentro del Partido Republicano, incluyendo una creciente división entre Trump y la legisladora Marjorie Taylor Greene, conocida activista de extrema derecha del movimiento MAGA y ferviente seguidora del expresidente. Thomas Massie, representante republicano por Kentucky y antiguo opositor de Trump, señaló que podría haber 100 o más votos a favor de la medida dentro de su partido. Además de Greene, otros dos congresistas republicanos se sumaron a Massie en la petición para liberar los archivos: Nancy Mace de Carolina del Sur y Lauren Boebert de Colorado. La ruptura pública entre Trump y Greene se hizo evidente la semana pasada cuando el expresidente anunció su respaldo a cualquier candidato que compita contra ella en las elecciones legislativas de noviembre de 2026, siempre y cuando sea la persona adecuada. Greene atribuyó esta separación a quedesafortunadamente, todo se reduce a los archivos de Epstein, argumentando que el país merece transparencia sobre este tema y calificando como confusa la crítica recibida por parte del presidente. No tengo idea de lo que hay en los archivos. Ni siquiera puedo adivinar. Pero esa es la pregunta que todos se hacen, ¿por qué luchar tan duro contra esto?, expresó Greene. La confrontación entre Trump y Greene escaló durante el fin de semana cuando el mandatario publicó en redes sociales:¡El hecho es que a nadie le importa esta traidora a nuestro país!. Frente a toda esta controversia y las tensiones internas en su partido, Donald Trump cambió su postura y declaró que los republicanos en la Cámara de Representantes deberían votar sobre la liberación de los archivos relacionados con el caso Epstein. No tenemos nada que ocultar, y es hora de dejar atrás esta farsa demócrata perpetrada por lunáticos de la izquierda radical para desviar la atención del gran éxito del Partido Republicano, escribió Trump en redes sociales tras regresar a Washington desde Florida. Se espera que la votación al respecto tenga lugar este martes. Fuente: Publimetro
El expríncipe Andrés ha sufrido una drástica pérdida de títulos y privilegios reales por su polémica relación con el delincuente sexual Jeffrey Epstein. Por orden de Carlos III del Reino Unido, Andrés ha sido despojado de sus títulos, su residencia en Royal Lodge y su reputación. Esta decisión es sumamente inusual, ya que casi no existen precedentes de un príncipe británico siendo despojado de su título. La última vez que ocurrió fue en 1919, cuando al príncipe Ernesto Augusto se le retiró su título británico por aliarse con Alemania durante la Primera Guerra Mundial. A partir de ahora, el expríncipe será conocido como Andrés Mountbatten-Windsor y se mudará a una vivienda remota en Sandringham, en el este de Inglaterra, abandonando su residencia en Royal Lodge. El cambio de nombre ajusta el apellido del príncipe al apellido compuesto elegido por la difunta reina Isabel II para sus descendientes hace 65 años. Este apellido combina Windsor, elegido por el rey Jorge V en 1917, con Mountbatten, el apellido del esposo de la reina, el príncipe Felipe. La exesposa de Andrés, Sarah Ferguson, también tendrá que encontrar un nuevo hogar tras esta decisión. La presión sobre el palacio para expulsar al príncipe se intensificó debido a nuevas revelaciones sobre su amistad con Epstein y las acusaciones de abuso sexual por parte de una víctima. A pesar de las acusaciones en su contra, Andrés Mountbatten-Windsor ha negado siempre cualquier implicación. El Palacio emitió un comunicado afirmando: “Estas censuras se consideran necesarias, a pesar del hecho de que él continúa negando las acusaciones en su contra. Sus Majestades desean dejar claro que su compasión y máximas simpatías han estado, y permanecerán, con las víctimas y sobrevivientes de cualquier y toda forma de abuso”. El hermano de una de las víctimas celebró la decisión: “Hoy, una chica estadounidense común derribó a un príncipe británico con su verdad y extraordinario coraje”, declaró en un comunicado. Andrés enfrenta ahora una mayor oprobio público tras la revelación de correos electrónicos que muestran un contacto más prolongado con Epstein del que había admitido previamente. Fuente: Publimetro
En un correo electrónico de 2011, el delincuente sexual condenado Jeffrey Epstein mencionó que Donald Trump “pasó horas” en su casa con una víctima de tráfico sexual y afirmó en otro mensaje posterior que el actual presidente de Estados Unidos “sabía sobre las chicas”, según comunicaciones divulgadas recientemente. Los correos electrónicos hechos públicos por los demócratas del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes generan interrogantes sobre la relación entre Trump y Epstein, así como sobre cualquier conocimiento que Trump pudiera haber tenido respecto a las actividades del delincuente sexual, quien se suicidó en 2019 tras ser acusado de explotar a menores. A pesar de estas revelaciones, el presidente republicano ha negado reiteradamente tener conocimiento de los presuntos crímenes de Epstein y ha asegurado haber cortado todo vínculo hace años. Estos mensajes forman parte de un conjunto de 23.000 documentos proporcionados por el patrimonio de Epstein al Comité de Supervisión. La divulgación revive una historia que había afectado la presidencia de Trump durante el verano, cuando tanto el FBI como el Departamento de Justicia decidieron no liberar más documentos, decepcionando a aquellos que esperaban nuevas revelaciones. En un correo electrónico fechado el 2 de abril de 2011 dirigido a Ghislaine Maxwell, una asociada cercana a Epstein, este escribió: “Quiero que te des cuenta de que el perro que no ha ladrado es Trump. (Nombre tachado) pasó horas en mi casa con él, nunca ha sido mencionado. jefe de policía. etc. estoy al 75% allí”. Maxwell respondió ese mismo día: “He estado pensando en eso”. Aunque el nombre de la persona que supuestamente estuvo con Trump fue censurado en el correo electrónico, los demócratas identificaron a esta persona como una “víctima”. En otro correo electrónico enviado en 2019 al periodista Michael Wolff, quien ha escrito extensamente sobre Trump, Epstein mencionó: “Por supuesto que sabía sobre las chicas ya que le pidió a Ghislaine que dejara de hacerlo”. La Casa Blanca respondió a estas revelaciones acusando a los demócratas de filtrar selectivamente correos electrónicos para difamar al presidente Trump. Según la secretaria de Prensa del gobierno, la persona no identificada en los correos electrónicos es Virginia Giuffre, quien había acusado al príncipe Andrés y otros hombres influyentes por explotación sexual y falleció por suicidio en abril. La vocera agregó: “El hecho sigue siendo que el presidente Trump expulsó a Jeffrey Epstein de su club hace décadas por ser un acosador con sus empleadas, incluida Giuffre”. Giuffre presentó públicamente su denuncia después de una investigación inicial que resultó en una condena para Epstein en Florida. Virginia Giuffre afirmó haber sido asistente adolescente en Mar-a-Lago, el club de Trump en Palm Beach, Florida, cuando Maxwell se le acercó en 2000. Cabe destacar que Epstein falleció en prisión mientras esperaba juicio por cargos federales. Por su parte, los abogados de Maxwell han argumentado que ella no debería haber sido juzgada o condenada por su papel en las actividades delictivas junto a Epstein. Fuente: Publimetro
Una estatua de bronce que representaba a Donald Trump de la mano con el fallecido delincuente sexual Jeffrey Epstein fue instalada en el National Mall de Washington D.C., pero su presencia fue efímera, ya que fue retirada apenas 24 horas después de su colocación. La obra, titulada “Mejores Amigos por Siempre”, fue creada por un grupo artístico anónimo y colocada frente al Capitolio de Estados Unidos. Sin embargo, el Servicio de Parques Nacionales decidió removerla en la madrugada del miércoles. Según informa The Washington Post, el Servicio de Parques Nacionales emitió un permiso que autorizaba la presencia de la escultura hasta el domingo 28 de septiembre a las 8 pm. La solicitud del permiso describía la instalación como una manifestación de libertad artística y expresión política. Sin embargo, la portavoz del Departamento del Interior, Elizabeth Peace, explicó que “La estatua fue retirada porque no cumplía con el permiso emitido”, sin detallar cuál era el incumplimiento específico. La vocera presidencial Abigail Jackson calificó la obra como un gasto inútil de dinero por parte de sectores liberales, cuando se dio a conocer la escultura el martes. La aparición de esta estatua se da en un contexto donde ha aumentado la presión para que se divulguen todos los documentos relacionados con el caso Epstein, debido a nuevas revelaciones judiciales. La relación entre Trump y Epstein ha sido objeto de análisis durante años, especialmente tras el arresto del último por tráfico sexual de menores en 2019. Trump y Epstein eran amigos desde la década de 1980, compartiendo eventos sociales y apareciendo juntos en diversas ocasiones. A pesar de haber volado en el avión privado de Epstein en varias ocasiones, su relación se habría deteriorado en 2004 debido a una disputa inmobiliaria. En relación con Epstein, Trump declaró públicamente en 2019 que hacía mucho tiempo que no tenía contacto con él y aseguró que no lo admiraba. Recientemente se divulgó un dibujo obsceno del 2003 con la firma de Trump, parte de una serie de regalos para Epstein por su cumpleaños número 50. Fuente: Publimetro
El Congreso de Estados Unidos aprobó un proyecto de ley que obliga al Departamento de Justicia a hacer públicos sus archivos sobre el delincuente sexual convicto Jeffrey Epstein, luego de meses de oposición por parte de Donald Trump y la cúpula republicana. Tras un intenso debate, el presidente estadounidense finalmente cedió ante la presión y afirmó que promulgará la ley. La Cámara de Representantes aprobó el proyecto con una votación 427-1, siendo el único voto en contra del representante Clay Higgins, un ferviente seguidor de Trump. Posteriormente, el Senado dio su consentimiento unánime. Este trabajo bipartidista refleja la creciente presión sobre los legisladores y el gobierno para cumplir con las demandas de hacer públicos los archivos del caso Epstein, quien se suicidó en 2019 mientras enfrentaba cargos por abuso sexual y tráfico de menores. “Estas mujeres han librado la lucha más horrenda que ninguna mujer debería tener que librar. Y lo hicieron uniéndose y nunca rindiéndose”, afirmó la representante republicana Marjorie Taylor Greene, acompañada por sobrevivientes del abuso, afuera del Capitolio. El proyecto de ley establece la publicación en 30 días de todos los archivos relacionados con Epstein y su investigación. Sin embargo, se permitirá censurar información sobre las víctimas o investigaciones en curso por motivos como vergüenza o sensibilidad política. A pesar de haber cortado lazos con Epstein hace años, Trump intentó durante meses evitar la divulgación de los archivos. Incluso se enfrentó en redes sociales con Marjorie Taylor Greene, quien lo acusó de traicionar al movimiento MAGA al oponerse al proyecto. Finalmente, Trump cambió su postura y pidió aprobar la publicación de los archivos tras darse cuenta del amplio apoyo que tenía el proyecto entre los votantes republicanos. La aprobación del mismo marca un hito en la lucha por la transparencia en este caso tan polémico. Fuente: Publimetro
El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump , se encuentra nuevamente en medio de una controversia con el movimiento MAGA (Make America Great Again) y sectores del Partido Republicano. En esta ocasión, la discordia gira en torno a la liberación de los archivos del Caso Epstein. Durante su campaña presidencial, Trump había prometido divulgar toda la información judicial relacionada con el delincuente sexual convicto Jeffrey Epstein, quien falleció en 2019. Sin embargo, una vez en el poder, cambió de parecer. El conflicto más reciente surgió luego de que congresistas demócratas revelaran un correo electrónico de 2011 de Epstein donde mencionaba que Donald Trump había pasado tiempo en su residencia con una víctima de tráfico sexual. Además, en un mensaje posterior, Epstein afirmaba que el actual presidente estadounidensesabía sobre las chicas. En este contexto, se ha planteado la posibilidad de que un considerable número de republicanos en la Cámara de Representantes respalde un proyecto de ley que obligaría al Departamento de Justicia a hacer públicos todos los archivos y comunicaciones relacionados con Epstein, así como cualquier información sobre la investigación de su muerte en prisión. Esta situación ha desencadenado una intensa disputa dentro del Partido Republicano, incluyendo una creciente división entre Trump y la legisladora Marjorie Taylor Greene, conocida activista de extrema derecha del movimiento MAGA y ferviente seguidora del expresidente. Thomas Massie, representante republicano por Kentucky y antiguo opositor de Trump, señaló que podría haber 100 o más votos a favor de la medida dentro de su partido. Además de Greene, otros dos congresistas republicanos se sumaron a Massie en la petición para liberar los archivos: Nancy Mace de Carolina del Sur y Lauren Boebert de Colorado. La ruptura pública entre Trump y Greene se hizo evidente la semana pasada cuando el expresidente anunció su respaldo a cualquier candidato que compita contra ella en las elecciones legislativas de noviembre de 2026, siempre y cuando sea la persona adecuada. Greene atribuyó esta separación a quedesafortunadamente, todo se reduce a los archivos de Epstein, argumentando que el país merece transparencia sobre este tema y calificando como confusa la crítica recibida por parte del presidente. No tengo idea de lo que hay en los archivos. Ni siquiera puedo adivinar. Pero esa es la pregunta que todos se hacen, ¿por qué luchar tan duro contra esto?, expresó Greene. La confrontación entre Trump y Greene escaló durante el fin de semana cuando el mandatario publicó en redes sociales:¡El hecho es que a nadie le importa esta traidora a nuestro país!. Frente a toda esta controversia y las tensiones internas en su partido, Donald Trump cambió su postura y declaró que los republicanos en la Cámara de Representantes deberían votar sobre la liberación de los archivos relacionados con el caso Epstein. No tenemos nada que ocultar, y es hora de dejar atrás esta farsa demócrata perpetrada por lunáticos de la izquierda radical para desviar la atención del gran éxito del Partido Republicano, escribió Trump en redes sociales tras regresar a Washington desde Florida. Se espera que la votación al respecto tenga lugar este martes. Fuente: Publimetro
El expríncipe Andrés ha sufrido una drástica pérdida de títulos y privilegios reales por su polémica relación con el delincuente sexual Jeffrey Epstein. Por orden de Carlos III del Reino Unido, Andrés ha sido despojado de sus títulos, su residencia en Royal Lodge y su reputación. Esta decisión es sumamente inusual, ya que casi no existen precedentes de un príncipe británico siendo despojado de su título. La última vez que ocurrió fue en 1919, cuando al príncipe Ernesto Augusto se le retiró su título británico por aliarse con Alemania durante la Primera Guerra Mundial. A partir de ahora, el expríncipe será conocido como Andrés Mountbatten-Windsor y se mudará a una vivienda remota en Sandringham, en el este de Inglaterra, abandonando su residencia en Royal Lodge. El cambio de nombre ajusta el apellido del príncipe al apellido compuesto elegido por la difunta reina Isabel II para sus descendientes hace 65 años. Este apellido combina Windsor, elegido por el rey Jorge V en 1917, con Mountbatten, el apellido del esposo de la reina, el príncipe Felipe. La exesposa de Andrés, Sarah Ferguson, también tendrá que encontrar un nuevo hogar tras esta decisión. La presión sobre el palacio para expulsar al príncipe se intensificó debido a nuevas revelaciones sobre su amistad con Epstein y las acusaciones de abuso sexual por parte de una víctima. A pesar de las acusaciones en su contra, Andrés Mountbatten-Windsor ha negado siempre cualquier implicación. El Palacio emitió un comunicado afirmando: “Estas censuras se consideran necesarias, a pesar del hecho de que él continúa negando las acusaciones en su contra. Sus Majestades desean dejar claro que su compasión y máximas simpatías han estado, y permanecerán, con las víctimas y sobrevivientes de cualquier y toda forma de abuso”. El hermano de una de las víctimas celebró la decisión: “Hoy, una chica estadounidense común derribó a un príncipe británico con su verdad y extraordinario coraje”, declaró en un comunicado. Andrés enfrenta ahora una mayor oprobio público tras la revelación de correos electrónicos que muestran un contacto más prolongado con Epstein del que había admitido previamente. Fuente: Publimetro
En un correo electrónico de 2011, el delincuente sexual condenado Jeffrey Epstein mencionó que Donald Trump “pasó horas” en su casa con una víctima de tráfico sexual y afirmó en otro mensaje posterior que el actual presidente de Estados Unidos “sabía sobre las chicas”, según comunicaciones divulgadas recientemente. Los correos electrónicos hechos públicos por los demócratas del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes generan interrogantes sobre la relación entre Trump y Epstein, así como sobre cualquier conocimiento que Trump pudiera haber tenido respecto a las actividades del delincuente sexual, quien se suicidó en 2019 tras ser acusado de explotar a menores. A pesar de estas revelaciones, el presidente republicano ha negado reiteradamente tener conocimiento de los presuntos crímenes de Epstein y ha asegurado haber cortado todo vínculo hace años. Estos mensajes forman parte de un conjunto de 23.000 documentos proporcionados por el patrimonio de Epstein al Comité de Supervisión. La divulgación revive una historia que había afectado la presidencia de Trump durante el verano, cuando tanto el FBI como el Departamento de Justicia decidieron no liberar más documentos, decepcionando a aquellos que esperaban nuevas revelaciones. En un correo electrónico fechado el 2 de abril de 2011 dirigido a Ghislaine Maxwell, una asociada cercana a Epstein, este escribió: “Quiero que te des cuenta de que el perro que no ha ladrado es Trump. (Nombre tachado) pasó horas en mi casa con él, nunca ha sido mencionado. jefe de policía. etc. estoy al 75% allí”. Maxwell respondió ese mismo día: “He estado pensando en eso”. Aunque el nombre de la persona que supuestamente estuvo con Trump fue censurado en el correo electrónico, los demócratas identificaron a esta persona como una “víctima”. En otro correo electrónico enviado en 2019 al periodista Michael Wolff, quien ha escrito extensamente sobre Trump, Epstein mencionó: “Por supuesto que sabía sobre las chicas ya que le pidió a Ghislaine que dejara de hacerlo”. La Casa Blanca respondió a estas revelaciones acusando a los demócratas de filtrar selectivamente correos electrónicos para difamar al presidente Trump. Según la secretaria de Prensa del gobierno, la persona no identificada en los correos electrónicos es Virginia Giuffre, quien había acusado al príncipe Andrés y otros hombres influyentes por explotación sexual y falleció por suicidio en abril. La vocera agregó: “El hecho sigue siendo que el presidente Trump expulsó a Jeffrey Epstein de su club hace décadas por ser un acosador con sus empleadas, incluida Giuffre”. Giuffre presentó públicamente su denuncia después de una investigación inicial que resultó en una condena para Epstein en Florida. Virginia Giuffre afirmó haber sido asistente adolescente en Mar-a-Lago, el club de Trump en Palm Beach, Florida, cuando Maxwell se le acercó en 2000. Cabe destacar que Epstein falleció en prisión mientras esperaba juicio por cargos federales. Por su parte, los abogados de Maxwell han argumentado que ella no debería haber sido juzgada o condenada por su papel en las actividades delictivas junto a Epstein. Fuente: Publimetro
Una estatua de bronce que representaba a Donald Trump de la mano con el fallecido delincuente sexual Jeffrey Epstein fue instalada en el National Mall de Washington D.C., pero su presencia fue efímera, ya que fue retirada apenas 24 horas después de su colocación. La obra, titulada “Mejores Amigos por Siempre”, fue creada por un grupo artístico anónimo y colocada frente al Capitolio de Estados Unidos. Sin embargo, el Servicio de Parques Nacionales decidió removerla en la madrugada del miércoles. Según informa The Washington Post, el Servicio de Parques Nacionales emitió un permiso que autorizaba la presencia de la escultura hasta el domingo 28 de septiembre a las 8 pm. La solicitud del permiso describía la instalación como una manifestación de libertad artística y expresión política. Sin embargo, la portavoz del Departamento del Interior, Elizabeth Peace, explicó que “La estatua fue retirada porque no cumplía con el permiso emitido”, sin detallar cuál era el incumplimiento específico. La vocera presidencial Abigail Jackson calificó la obra como un gasto inútil de dinero por parte de sectores liberales, cuando se dio a conocer la escultura el martes. La aparición de esta estatua se da en un contexto donde ha aumentado la presión para que se divulguen todos los documentos relacionados con el caso Epstein, debido a nuevas revelaciones judiciales. La relación entre Trump y Epstein ha sido objeto de análisis durante años, especialmente tras el arresto del último por tráfico sexual de menores en 2019. Trump y Epstein eran amigos desde la década de 1980, compartiendo eventos sociales y apareciendo juntos en diversas ocasiones. A pesar de haber volado en el avión privado de Epstein en varias ocasiones, su relación se habría deteriorado en 2004 debido a una disputa inmobiliaria. En relación con Epstein, Trump declaró públicamente en 2019 que hacía mucho tiempo que no tenía contacto con él y aseguró que no lo admiraba. Recientemente se divulgó un dibujo obsceno del 2003 con la firma de Trump, parte de una serie de regalos para Epstein por su cumpleaños número 50. Fuente: Publimetro